Redireccionada

No sé porqué pero tal como Proust en su literatura

pone en práctica su método tras el recuerdo del sabor de una magdalena,

mi memoria involuntaria juega con mis sentidos...

Últimamente hay un olor que me persigue...

es más es algo nuevo, que extraño, ¿casualidad?

O tendrá algo que ver con...

¿Quizás es una señal?

Hoy iva pensando en el autobús lo inquietante y emocionante que es la vida,

nunca se sabe lo que puede pasar, el mundo a tu alrededor está en constante movimiento,

yo prefiero ser una persona ilimitada, no decir yo nunca, porque nunca  (y nunca mejor dicho) se sabe lo que pasará el día de mañana.

Cuando voy por la calle en modo de evasión con el mundo con mi música y mis pensamientos en constante funcionamiento...noto una sensación extraña pero a la vez placentera.

Como describirlo...es algo que solo yo siento y como si no tuviese a nadie alrededor, estoy yo y el mundo... un mundo como tal en el cual hay que descubrir mil cosas mas. Es una soledad en cierto modo excepcional... porque estamos y no estamos solos, es una contradicción que me lleva por el camino de la duda.

Me crezco, aunque sea una más para todo... a excepciones. Por muy insignificante que haya sido una persona en tu vida en cierta parte marca un sentido/momento en toda vida de persona, aunque se olvide algún día de esta descontrolada vida de alcohol y pérdida de neuronas por doquier.

Hay un camino llamado ''VIDA'' el cual se pierde en el horizonte llamado ''MUERTE o LA NADA'' quiero desviarme por los callejones llamados ''no se lo que pasará mañana, y no me importa''

Hay cosas que hecho en falta... si bueno, la evasión en Madrid es poco posible, quiero enseñarte el cielo de Mallorca, no hace falta buscar las estrellas... quiero tumbarme cerca del mar, escuchar el sonido del agua como se mueve y choca contra las rocas. Aunque también es divertido jugar al escondite en el cielo de Madrid, las noches de Madrid de por sí son únicas, búscame yo te busco, tú me encuentras, yo me río....

Mira una estrella! no hay mas... aunque siempre se acaban encontrando siete,ocho,nueve... misterioso cielo de Madrid, quizás esconda más misterios que yo, más que mis tipos de miradas o sonrisas.

Tener sueños es de buen soñador, aunque la vida te enseña a no hacer planes a largo plazo, nunca salen bien, a mi me encanta la improvisación... sorpréndeme, tengo ganas de hacer alguna locura.

''No sueltes mi mano parte II, o Déjame caer finalmente, pero hazlo ya''